Los difusores de aromaterapia, son una excelente manera de aprovechar los efectos terapéuticos de los aceites esenciales a través de la vía olfativa. Sin embargo, es importante tener en cuenta algunos aspectos para garantizar una experiencia segura y beneficiosa.
En primer lugar, es fundamental utilizar aceites esenciales que no sean dermocáusticos, irritantes, sensibilizantes o tóxicos, ya que el difusor llenará nuestro espacio con partículas de aceites esenciales. Es importante elegir aceites esenciales puros que no hayan sido sometidos a ninguna adulteración química o sintética.
Además, es primordial tener en cuenta las posibles contraindicaciones del uso de difusores con aceites esenciales, en personas asmáticas o alérgicas a algunos de sus componentes, ya que su uso puede estar contraindicado. Lo mismo ocurre en el caso de personas con sensibilidad química múltiple (SQM), porque pueden experimentar reacciones adversas.
DIFERENTES TIPOS DE DIFUSORES:
- Difusor de calor suave: Este tipo de difusor utiliza calor suave para dispersar los aceites esenciales en el aire. Es importante tener en cuenta que los aceites esenciales pueden perder sus propiedades si se exponen a temperaturas superiores a 45°C. Estos difusores permiten una propagación sutil sin comprometer la calidad de los aceites esenciales.
- Difusor de evaporación: Expone los aceites esenciales al aire, permitiendo que se evaporen lentamente y se dispersen en el entorno. Ideal para espacios reducidos donde se desee una difusión discreta.
- Difusor de ventilador: Utilizan un ventilador para propulsar las moléculas de los aceites esenciales en el aire. Los aceites esenciales se depositan en un soporte absorbente tipo celulosa. El modo de difusión es en frío, lo que significa que las propiedades de los aceites esenciales se conservan, ya que no se exponen a altas temperaturas.
- Difusores ultrasónicos: Estos difusores utilizan vibraciones ultrasónicas para crear una fina bruma aromática a partir de una mezcla de agua y aceites esenciales en el recipiente del difusor. La difusión es en frío, lo que garantiza que las propiedades de los aceites esenciales se mantengan intactas.
- Difusores por nebulización: Estos difusores emiten vibraciones que descomponen las moléculas aromáticas en partículas extremadamente pequeñas, lo que permite una dispersión más efectiva en el aire. Los aceites esenciales se depositan directamente en el recipiente del difusor sin necesidad de diluirlos en agua.
Cada tipo de difusor tiene sus propias ventajas y características, y la elección del difusor adecuado depende de tus preferencias y del entorno en el que desees utilizarlo.
ACEITES ESENCIALES RECOMENDADOS PARA SU USO EN DIFUSOR:
AE Bergamota
AE Lavanda
AE Eucalipto
AE Geranio de Egipto
AE Naranja dulce
AE Menta piperita (usar con moderación)
AE Limón
AE Mandarina
AE Neroli
AE Ylang-Ylang
ACEITES ESENCIALES NO RECOMENDADOS PARA SU USO EN DIFUSOR:
AE Canela
AE Orégano
AE Tomillo
AE Clavo de olor
AE Menta piperita (usar con moderación)
¿CÓMO LIMPIAR UN DIFUSOR DE ACEITES ESENCIALES?
Se recomienda limpiar el difusor después de cada uso, para eliminar el residuo de aceite y la acumulación de agua dura. La mejor opción es limpiarlo con alcohol etílico.
¿CUÁNTAS GOTAS DE ACEITE ESENCIAL DEBO PONER EN EL DIFUSOR? Eso dependerá de varios factores:
- Dimensiones de la habitación.
- Potencia del aparato. Por ejemplo, en un difusor ultrasónico de 100 ml de agua, se pueden agregar de 3 a 5 gotas.
- Intensidad del aceite esencial que se está utilizando. No es lo mismo usar un AE de mandarina que uno de menta piperita.
- Gusto personal. Recuerda que cada persona es diferente, por lo que es probable que tengas que experimentar con diferentes cantidades hasta encontrar la que te funciones.
NOTA: Se recomienda leer en el apartado de Aromaterapia de mi blog, el artículo Consejos y Precauciones en la utilización de los aceites esenciales.
